Los Impactos Socioeconómicos del Ruido

El impacto acústico de los aeropuertos, además de los efectos de calidad de vida y salud causados sobre la población, provoca un gran número de problemas que se derivan a otros sectores, puesto que la afectación directa a la población tiene consecuencias a su vez sobre aquellos que se dedican al negocio del transporte aéreo. Así, por ejemplo, el coste para el aislamiento acústico de residencias debe ser financiado por los mismos aeropuertos y las compañías aéreas. A esto cabe añadirle las restricciones de operaciones de vuelo o los “toques de queda” de vuelos nocturnos, factores que conllevan una reducción de la flexibilidad operacional y de los ingresos de los operadores de los aeropuertos así como de las compañías. Esto, a su vez, tiene también repercusiones negativas para el empleo y los ingresos fiscales que a su turno podrían tener un efecto negativo sobre las comunidades circundantes (S. Zass, 2006). Por último, no cabe olvidar el impacto que ejerce el ruido sobre el precio de las viviendas afectadas. Varios estudios demuestran tal relación, como es el caso del documento Noise versus Acces (J. Tompkins et al, 1998), en el que se muestra la gran diferencia de precios que se da entre aquellas viviendas cercanas al aeropuerto pero no afectadas por el ruido y aquellas, que quizá se encuentran en sectores más alejados que por motivos de rutas, quedan más afectadas por el ruido y por consiguiente tienen un menor valor. Otro estudio, The Impact of Airport Noise and Proximity on Residential Property Values (M. Espey y H. Lopez, 2000), examina la reducción inmediata del valor que sufren las viviendas, en este caso no tan cercanas, con el aviso de la expansión de los aeropuertos y sus posibles rutas futuras.

Solo para hacernos una idea, tal y como nos recuerda la Dirección General de medio ambiente de la Comisión Europea, en la actualidad (2001) las pérdidas económicas anuales en la Unión Europea inducidas por el ruido ambiental se sitúan entre los 13.000 y los 38.000 millones de euros. Cabe hacer mención, que en los estudios de la Dirección General se tienen en cuenta aspectos tales como la reducción del precio de la vivienda, los costes sanitarios, la reducción de las posibilidades de explotación del suelo o el coste de los días de abstención al trabajo provocados por la contaminación acústica.